Hoy me topé de lleno con tu recuerdo. Muchos años después, presente con la fuerza eterna.
Sigo llevando tu sonrisa como estandarte principal de toda batalla, por que vos me enseñaste
que en cada batalla te vas curtiendo, lastimando y cicatrizando. Influenciaste mi escencia y
hoy soy lo que soy, en mucho, por vos.
Se que te voy a extrañar toda mi vida, que las cosas suceden por algún motivo, y que hoy estas
muy bien. En esta semana se me movió el piso en mas de una oportunidad, y vos saliste de bocas
muy cercanas a mi como si le estarías diciendo las cosas que vos siempre me decias a mi.
Gracias. Hoy te recuerdo, como siempre, y se me transforma lo gris en color. No hay distancia que pueda separarnos, no hay dolor que no cure tanto amor puro, no hay escencia tan espectacular. La suavidad de tus yemas y la risa achinada. No todo es rosa, ni todo gris. No todo dulce, ni amargo. Siempre estarás conmigo, y yo se que con vos acompañandome, de toda batalla salgo mas ileso, y menos lastimado.
Anoche fui a buscar tu pañuelo, después de un día bastante significativo, lo bese y senti el olor a tu biscochuelo.
Gracias por darme todo, y por venir siempre conmigo a la par. Peleandola, creciendo, y dandole el lugar que se merece al dolor y a la angustia. Gracias por dejarme ese legado y hacerme capaz de transportarlo y
que personas que quiero mucho y me hacen muy bien puedan sentir que todo eso que vos me diste, es tan puro que traspasa toda distancia. Que adentro esta el diluvio, y parece que nunca va a parar. Y va a parar.
Pura vida. Te amo.
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Hace 2 años